El inicio de un nuevo año en un momento político, climático y social tan agitado como el actual, genera incertidumbre, sobre todo en el entorno laboral. El mundo no solo se está acoplando a nuevos gobiernos, sino a una transformación del mundo laboral dada por los avances digitales. En este artículo analizamos cómo se presenta el futuro del trabajo desde diferentes perspectivas y cómo pueden prepararse las empresas para esta transformación. 

El 45% de las tareas actuales podrían ser automatizadas con tecnología ya disponible

Uno de los aspectos que más preocupa a las personas y sobre todo a las organizaciones, que velan por los derechos laborales, es la transformación digital y la incorporación de la Inteligencia Artificial (IA) en diferentes campos laborales. Desde hace unos años la IA ha revolucionado el mundo y el entorno empresarial ha buscado formas de introducirla en sus procesos para ahorrar costos, tiempos y mejorar sus procesos. 

Es innegable la capacidad de las máquinas para aprender, razonar y colaborar de manera autónoma y, según consultoras internacionales como McKinsey, más del 45% de tareas se pueden automatizar sin necesidad de crear nuevas tecnologías o desarrollar nuevos avances de IA. 

Con este panorama, el futuro del trabajo se presenta con diversas aristas y retos para las empresas y los equipos de Recursos Humanos (RR. HH.). Grandes corporaciones como Nvidia afirman que podrían llegar a imaginar un futuro en el que personas y robots trabajen en conjunto. Incluso la empresa de software asegura que va a tener 50.000 empleados humanos y más de 100 millones de asistentes de inteligencia artificial en el futuro.

Transición productiva hacia nuevas formas de empleo

El reciente Reporte del Foro Económico Mundial sobre el futuro del trabajo en 2025 subraya la importancia de que los gobiernos trabajen en conjunto con el sector empresarial y educativo para lograr una transición productiva hacia nuevas formas de empleo. Con tareas como reentrenamiento, inclusión de grupos marginados y estrategias centradas en la sostenibilidad y la ética, se podrán capitalizar las oportunidades del futuro para asegurar que sea una transformación positiva y equitativa. 

Además, el mismo informe hace hincapié en los siguientes temas para lograr ese objetivo:

• Desigualdad: aunque muchas empresas aseguran haber alcanzado la paridad de género, aún están estancadas en la igualdad salarial que no solo resta oportunidades a las mujeres, sino que las motiva menos a involucrarse en nuevos mercados o en nuevas profesiones. 
• Liderazgo: en un momento tan complejo para el entorno laboral, el liderazgo será el que haga la diferencia entre una transición positiva y una negativa. La empatía, la inteligencia emocional y la capacidad de inspirar confianza serán esenciales en este proceso. Además, este liderazgo debe apoyarse en la tecnología para lograr equipos autogestionados y con estructuras ágiles. 
• Pros y contras de la IA: para un futuro equilibrado es importante entender que la IA no será la respuesta a todas las necesidades de la empresa. Es una realidad que casi el 40 % de las habilidades requeridas para los trabajos actuales cambiarán para 2030 y que las profesiones deberán transformarse para responder a ese cambio. Sin embargo, las empresas deben entender que las capacidades humanas como resiliencia, flexibilidad y pensamiento crítico seguirán siendo fundamentales para los procesos empresariales. 
• Situación mundial: la transformación laboral se verá afectada por presiones económicas, cambios demográficos y tensiones geopolíticas que harán que la educación en zonas marginadas se empiece a priorizar y que las habilidades en ciberseguridad y comercio internacional se requieran con más fuerza. Además, la diversificación de la fuerza laboral también llevará a que, a través de plataformas digitales, se conecte el talento con proyectos específicos, lo que transformará aún más el mercado laboral. 
• Activismo e IA responsable: tras el auge de la IA, las cuestiones éticas se han dejado de lado en muchos escenarios. Es así que los empleados han empezado a exigir la adopción de normas éticas para la IA. Además, las empresas deben empezar a pensar en la soledad de los empleados y cómo los está afectando la IA en todos los aspectos de su vida. 
• Transformación de sectores: es fundamental entender que la forma en la que se entienden las profesiones hoy no será la misma para 2030. Las empresas deberán enfrentar el cambio de los sectores laborales, anticiparse a ellos y fusionarlos de la mejor forma con las necesidades empresariales. 

Finalmente, un término que aparece mucho al pensar en el futuro del trabajo es resiliencia. Una de las realidades de 2025 es que las organizaciones que logren equilibrar la tecnología con enfoque humano, prioricen la sostenibilidad y promuevan la inclusión, tendrán mayores probabilidades de prosperar en un mercado en constante evolución. Además, desarrollar estrategias integrales que equilibren el impacto de los cambios, será fundamental para lograr equipos resilientes.

IA y futuro laboral Colombiano 

La IA se ha convertido en un arma de doble filo para las empresas en el mundo y, como se mencionó antes, las que no logren un equilibrio, verán sus objetivos truncados. Aunque es una oportunidad de generar procesos eficientes, también demanda talento específico que no es suficiente o que no está siendo capacitado de forma adecuada. 

Mientras que, en Europa, el 73% de las empresas emplean IA, pero solo el 30% forma a sus empleados en el uso de la misma, en Colombia, más del 60% de las empresas tiene dificultades para encontrar talento con las habilidades requeridas. 

Este panorama, que es una realidad en el mundo y que tiene a grandes potencias peleándose por el talento disponible, responde, por lo menos en Colombia, a una disminución del interés en las carreras STEM, bajo bilingüismo y la creciente demanda de habilidades especializadas en IA y áreas relacionadas. 

Sin embargo, este problema también puede desembocar en nuevas oportunidades. Con las nuevas proyecciones de las empresas, se estima que se van a crear millones de nuevos empleos en diferentes áreas y proyectará a la IA como un motor de crecimiento económico y de generación de empleo. 

Un horizonte de oportunidades 

No hay certezas del panorama laboral futuro, pero sí de cómo pueden prepararse las empresas para estos cambios, resistirlos y salir a flote. Ya se mencionó que el equilibrio entre talento humano y tecnología será determinante. Pero también el uso de servicios como el de Tusdatos para encontrar al mejor talento que no solo corresponda con las exigencias tecnológicas, sino que sea de confianza y tenga la formación adecuada para los objetivos empresariales. 

Con el apoyo de tecnologías como la de Tusdatos, las empresas pueden rastrear a cualquier persona o empresa con el fin de hacer vinculaciones óptimas en términos de seguridad y viabilidad. Para conocer más de este servicio que brinda información bajo todos los parámetros éticos y de protección de datos, las empresas se pueden poner en contacto con nosotros y conocer de cerca las opciones que tenemos para un futuro laboral más amable, seguro y equilibrado.